Hay algo más grande que todo esto. Y está escondido en tu existencia, en cada aliento que tomas. Cuando miras al universo con asombro, con fascinación, pensando: ¡guau!, de eso se trata todo. Y cuando puedes volverte hacia el universo dentro de ti y dices “¡guau!”, entonces tú lo comprendiste. Entonces lo comprendiste. De eso se trata todo.