Olvidamos quienes somos. En este desierto, a la primera persona que necesitas comprender, no es a tu amigo no es a un pariente, ni a un colega. Lo primero que necesitas comprender es quién eres. La verdad, la realidad, la belleza, la prosperidad, la paz que estás buscando, nunca las perdiste. Nunca. Siempre estuvieron contigo.